El diputado local panista Ricardo Torres Origel admitió que en la configuración del sistema estatal anticorrupción hay escépticos que creen que se trata de un sueño o una utopía pero advirtió que si bien se trata de un tema complejo, lo peor es quedarse de brazos cruzados por lo que los legisladores no pueden renunciar a la posibilidad de mejorar las cosas.
Tras la conclusión del tercer foro para recoger propuestas para el trabajo legislativo que arranca en un par de semanas más, dijo que además de propuestas, han recibido críticas las cuales son bienvenidas y son valiosas cuando se acompañan de una propuesta.
En ese contexto, dijo que los legisladores no se engañan y saben de las limitaciones de las leyes pero también que se trata de una acción que ayudará a renovar los esfuerzos en la lucha contra la impunidad.
“No podemos dejar pasar las cosas como si nada existiera, es por eso que nos metimos en esta tarea, sí muy compleja, sí austera, difícil de construir un nuevo marco jurídico que combata la corrupción, no podemos quedarnos con los brazos cruzados. Es muy fácil desde afuera criticar y reclamar, es más fácil señalar sin comprometerse a nada.”
El presidente de la comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales dijo que este viernes se instalará en el congreso del Estado, la mesa de trabajo previo al último foro a celebrarse en León el próximo martes.
Reiteró que a partir de los primeros días de mayo comenzar a trabajar un proyecto de dictamen que deberá quedar aprobado antes del 27 de mayo.