El director de Movilidad ,en León Luis Enrique Moreno Cortés, afirmó que bastaba con haber instalado botones de pánico en los taxis para poderles dar una mejor comunicación con las dependencias de seguridad en lugar de haber creado un programa como “Taxi Seguro” en el que se pagaron 14 millones de pesos a la empresa de telefonía y se invirtieron 11 millones más en la compra del Software que hoy ya no existe.
El director de Movilidad, Luis Enrique Moreno Cortés, mencionó que cuando inició esta administración se pudieron detectar 60 equipos de los 3 mil 800 que se repartieron del programa taxi seguro, porque eran teléfonos que aún marcaban señal y enviaban reportes, pero realmente la ubicación y operación de los equipos que se mencionaban en los expedientes no había rastros ya.
Moreno Cortés explicó que taxi seguro tuvo 2 contratos 1 de Software e instalación en los equipos que costó 11 millones de pesos, pero además hubo otro con Radio Movil DIPSA que se encargaba realmente solo de la línea de transmisión de datos y telefonía, que realmente ya no daba el servicio, por lo que desde su óptica todo este sistema no era necesario pues pudieron haberse buscado otras alternativas con los taxistas.
Aquí en términos prácticos debió contratarse un bendito botón de pánico y eso solamente es lo que debió estar, porque para entregar un celular a cada taxista no sé cuál era el fundamento, osea hay esquemas de seguridad que son un botón de pánico y ya, no necesitan estar hablando por teléfono por eso fue la facilidad para que muchos de esos 3 mil 800 estuvieran haciendo un uso distinto para el cual fueron entregados, osea realmente el sistema se encontró con esos 60, se da parte a la Contraloría y nosotros como dirección teníamos que pasar un reporte a Servicios Generales a que se pagarán esas facturas, nosotros no, sino brindaban ningún servicio no íbamos a autoridad ningún pago entonces sse reucrrió al área jurídica para que promoviera la impugnación de ese contrato”
A la fecha a Radio Móvil DIPSA se le adeudan alrededor de 10 millones de pesos, mientras que el contrato del software ya estaba vencido cuando inició la administración de Héctor López Santillana.
De acuerdo a lo que puntualiza Luis Enrique Moreno Cortés muy pocos equipos fueron entregados realmente a concesionarios, la mayoría era a choferes y no se encontró incluso evidencia de los 700 que no fueron repartidos a los taxistas y se presume que muchos choferes desbloquearon los equipos y les dieron un uso personal, mientras mes con mes el gobierno municipal pagaba con recursos del erario.
Argumentó además que esta dirección de movilidad solo respondió a la contraloría las observaciones para las cuales tiene evidencia, por eso hubo otras que no pudieron ser atendidas en la auditoría que realizó.
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