Durante la Semana Santa cuatro personas murieron ahogadas en presas o estanques de León, a pesar del reiterado llamado de las autoridades a no meterse a dichos cuerpos de agua que no son aptos para nadar.
Los decesos ocurrieron en las comunidades de Mesa de Obispo, Estancia de los Sapos, Nuevo Valle de Moreno y Parque Chapalita.
Según declaró el director de Protección Civil del municipio, Francisco Nicolás Escobar Tovar, en algunas ocasiones, las personas no acataron las indicaciones de sus elementos, por lo que tuvieron que recurrir a la Sedena para que hicieran caso.
No acataban las indicaciones, entonces pues nos tuvimos que apoyar con Sedena porque Tránsito y Policía también andaban en sus operativos, más los nuestros cuidando otros cuerpos de agua, entonces sí llegó un momento en que estábamos saturados de cuidar cuerpos de agua, y afortunadamente Sedena llegó y solucionó el problema”.
(Cuando llegan los elementos de la Sedena) pues sí (hacen caso), pero estamos hablando del tercer nivel más alto que es el federal”, declaró en entrevista.
Refirió que las presas o estanques más concurridos son las ubicadas en Los Sapos y Los Ramírez, en el sur de la ciudad, y en el norte, en Las Joyas; y reiteró el llamado a la ciudadanía para que no se meta a estos lugares.
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