El ataque ocurrido en la colonia Santa María de Cementos el pasado fin de semana no fue aleatorio sino una agresión directa en contra de dos de las seis personas que murieron, una de ellas menor de edad, aseguró la secretaria ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad Pública, Sophia Huett López.
Aunque se reservó los detalles de la investigación que ya realiza la Fiscalía General del Estado, Huett López dijo que este ataque que dejó seis muertos y seis lesionados es parte de la rivalidad entre grupos delincuenciales.
“No fue aleatorio, no es que haya sido una fiesta infantil o una fiesta de familia, de hecho lo que les puedo comentar al respecto es que es parte de lo que hemos venido comentado, la rivalidad delincuencial; y en este caso una agresión muy directa con quien ya se tenía un antecedente”.
La funcionaria estatal hizo un llamado a evitar el cobijo social al crimen porque hay una relación directa entre el incremento del consumo de drogas y el aumento de la violencia.
En ese sentido insistió en que si la sociedad cree que combatir el narcotráfico es solo un asunto de las autoridades, el gobierno alcanzará la meta de vencer a la delincuencia pero se va a tardar más.
Huett expuso que hoy las dinámicas familiares se vuelven más complejas por el consumo y la venta de drogas de familiares que no están vinculados a las actividades ilícitas.
Expuso que la rivalidad de grupos criminales ha atrapado a las familias en una espiral de venganzas en la que las víctimas ya no solo son los que están directamente involucrados sino quienes nada tienen que ver con el asunto.
En ese contexto, llamó a los ciudadanos a confiar en la autoridad para denunciar actividades ilegales pues la autoridad no los va a criminalizar en automático.
“Cuando existe la participación de un integrante de una familia a la que se pone en riesgo es absolutamente a toda la familia”.