La zona urbana que conforman León y Silao fue la que obtuvo peores resultados en el Índice de Competitividad Urbana (ICU) 2018, entre las poblaciones de más de 1 millón de habitantes, al conseguir una calificación de competitividad “media-baja”.
El estudio elaborado por el IMCO, que abarcó 59 zonas metropolitanas y 14 zonas urbanas relevantes por el tamaño de su población, mide la capacidad de las ciudades mexicanas para atraer y retener talento e inversiones, así como maximizar la productividad y el bienestar de sus habitantes.
De los 10 rubros que abarcó el ICU 2018, en el que peor fue evaluado León fue en el subíndice de mercado de factores, el cual integra indicadores que evalúan y comparan los costos y la productividad del trabajo, así como los costos de producción de la energía eléctrica. En él, León obtuvo calificación de baja competitividad.
En donde fue evaluado con una competitividad media-baja, fue en los subíndices de Sociedad y Gobierno, que miden la calidad de vida de los habitantes y la capacidad de los municipios para promover el desarrollo económico y la formalidad de la economía, respectivamente.
El mismo nivel de competitividad obtuvo en las áreas de Innovación, Relaciones Internacionales y Precursores. Estos dos últimos evalúan el aprovechamiento de lazos con el exterior para elevar su competitividad, y los sectores financiero, de telecomunicaciones y de transporte del municipio, respectivamente.
Los subíndices en los cuales León obtuvo un nivel de competitividad media-alta fueron Derecho, medio ambiente, sistema político y economía; sin embargo, en ninguno de los 10 subíndices medidos por el IMCO obtuvo un nivel de competitividad alta.
Las zonas urbanas o regiones metropolitanas mejor evaluadas, cuya población supera el millón de habitantes, fueron, en primer lugar, el Valle de México, seguido de Ciudad Juárez y Querétaro.
Las peores evaluadas, junto con León, fueron Cuernavaca y La Laguna.
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