En el segundo trimestre del año, en León se agregaron más de 6 mil personas a las filas del desempleo, pero a decir del secretario de Reactivación Económica del municipio, Guillermo Romero Pacheco, esto se debe en parte a la intensa migración de personas de otras entidades hacia la ciudad.
De acuerdo con los últimos datos reportados por el INEGI, en el periodo abril-junio en León hubo 39 mil 777 personas que buscaron un empleo sin éxito, lo que representó una tasa de desempleo del 4.5 por ciento.
Estas cifras son superiores a las que se registraron en el primer trimestre del año, cuando el INEGI reportó una tasa de desocupación del 3.9 por ciento, es decir, 6 mil 012 desempleados menos en comparación con el segundo trimestre.
Lo anterior va en sentido opuesto a lo que ocurre a nivel estatal, pues en el segundo trimestre del 2022 Guanajuato reportó una tasa de desempleo de solamente 2.9 por ciento, que es prácticamente la mitad de lo que se registró en el primer trimestre.
Al respecto, Guillermo Romero señaló que uno de los factores que explican este fenómeno es que en los últimos 6 o 7 años, han llegado al municipio cerca de 200 mil personas de otros estados, lo cual eleva la cantidad de mano de obra disponible.
“Hay un dato censal que puede haber hasta 200 mil personas que han llegado en los últimos 6 o 7 años provenientes de otro lugar; yo en la gira me he encontrado personas de Guerrero, Tlaxcala, del Estado de México, que han llegado a León, una ciudad que por su dinámica es atractiva. El fenómeno migratorio es algo que nos vamos a morir y va a seguir, es de naturaleza humana”, dijo.
Por lo anterior, señaló que incluso no sería extraño que eventualmente hay centroamericanos que se establezcan en la ciudad y se empleen en la industria del calzado, por ejemplo.
El funcionario municipal agregó que otro factor que pega en la tasa de desempleo es la baja inversión en obra pública, pues el sector de la construcción da empleo temporal a una cantidad de personas, por cada proyecto que se ejecute.
Sin embargo, confió en que a partir del programa de obra pública presentado por la alcaldesa Alejandra Gutiérrez, junto con la solicitud de deuda que se utilizaría en el 2023, mejoren de forma sustancial los indicadores de puestos de trabajo en el ramo constructor.