El presidente de la Confederación de Bares y Cantinas en el estado, Javier Quiroga López, indicó que existe la presunción de que algunos propietarios de estos establecimientos no afiliados a esta organización han llegado a “arreglos económicos” con autoridades municipales con tal de que se les permita operar a pesar de que el semáforo está en rojo.
Sostuvo que es inexplicable que en ocasiones personal de Fiscalización llegue a cerrar una cantina y a pocos metros deje operar a otra de manera impune. Incluso señaló que tampoco la autoridad sanitaria ni Protección Civil intervienen con esos establecimientos.
“Algunas personas me dicen que el arreglo ha sido inclusive monetario que es lo que nos ha preocupado mucho más, no podemos decir que esto sea cierto pero lo que sí es cierto es que cantinas no afiliadas al sector están abiertas y nadie les molesta”, dijo.
“Insisto, es presunción pero no tenemos otra explicación porque hay ocasiones que se cierran algunos establecimientos de la asociación y a un par de cuadras están trabajando negocios similares, que nos consta que son cantinas con permiso de cantina, y nadie los molesta”, añadió.
Quiroga indicó que esta situación irrita a los propietarios de bares y cantinas que sí han acatado la disposición de la autoridad de no abrir mientras el semáforo estatal se mantenga en rojo, de acuerdo con el número de personas contagiadas de la covid-19.
Apuntó que el gremio está desesperado porque mientras la autoridad municipal les impide abrir, no es igual de exigente con aquellos ciudadanos que no usan cubrebocas o con establecimientos que abren cuando legalmente no deberían hacerlo.
Esta situación ha derivado que al menos 12 bares y cantinas agremiados hayan optado por cerrar de manera definitiva, cifra que irá en aumento conforme pase el tiempo, advirtió Javier Quiroga, quien además lamentó que el Municipio tampoco les deje vender solo alimentos a pesar de que el servicio que ofertan es muy similar al de restaurantes.