La secretaria ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad Pública, Sophia Huett López, señaló a las centrales de C4 de los municipios por filtrar información que termina por facilitar el asesinato de policías.
Lo anterior, luego de que, en un lapso de seis días, tres elementos municipales fueran ejecutados: Manuel Quiroga, en León, el 21 de abril; Ana Lidia, en Silao, el 25 de abril; y este martes por la madrugada fue asesinado el comandante de la Policía de Irapuato, Roberto Contreras.
Sophia Huett apuntó que los tres elementos fueron asesinados cuando acababan de terminar su turno, y por ende, desarmados, por lo que los municipios deben ajustar los protocolos de seguridad para protegerlos en ese momento.
Entre las mejoras a realizar, planteadas por la funcionaria estatal, están el implementar esquemas institucionales de custodia y mayor comunicación con los policías para que externen cuando son amenazados o presionados por criminarles para ser omisos en su función.
Sin embargo, Sophia Huett también apuntó a los C4 por filtrar información que termina en manos de grupos criminales.
“De los C4 a veces se filtra toda la información. La Ley general del sistema nacional de seguridad pública lo especifica muy claramente que un integrante de una corporación no puede compartir información a quien no tenga derecho a ella, y eso es lo que están haciendo, están fugando información a personas, con otro tipo de intereses, que pueden privar de la vida a las personas”, dijo.
Por lo anterior, subrayó que los municipios también deben depurar sus C4, cuyos integrantes, al igual que los policías, deben acreditar sus respectivas pruebas de control de confianza.
Agregó que los homicidios de policías obedecen al buen trabajo que realizan y que incomoda a los grupos delincuenciales, por lo que los gobiernos municipales están obligarlos a protegerlos mejor, más allá de si se aprueba o no la reforma que permitiría que a los elementos portar su arma, aún estando en sus días de descanso.
Si algunos gobiernos municipales no lo han hecho, añadió, es por exceso de confianza.
“Falta de recursos humanos no creo, creo que es el momento de ponerse las pilas. Cualquier omisión está costando vidas de personas que utilizan un uniforme y que han decidido abrazar una vocación; es tiempo de hacer un análisis en sus protocolos, en muchos de los casos hay un exceso de confianza y no se toman las medidas pertinentes, los alcaldes tienen que proteger a sus policías”, dijo.