El futuro de Julio Urías está en riesgo tras ser arrestado por violencia doméstica. El lanzador mexicano pagó una fianza de 50 mil dólares luego de su detención cerca del estadio BMO y ahora enfrenta consecuencias graves tanto en su carrera como en su libertad.
Tanto la oficina de las Grandes Ligas como los Los Angeles Dodgers han tomado medidas en este caso. Urías ha sido separado del roster del equipo y no viajará con sus compañeros para la serie ante Miami Marlins, que comienza hoy.
La investigación contra Urías ya está en marcha y las posibles repercusiones son significativas. Desde perderse los playoffs hasta recibir sanciones que podrían abarcar más de una temporada, su futuro en el béisbol está en la cuerda floja. Aunque existe la remota posibilidad de ser absuelto, este incidente es su segunda violación a las políticas de violencia doméstica de MLB, lo que podría tener consecuencias graves para su carrera.
Además, esta situación llega en un momento crucial, ya que al finalizar la temporada actual, Urías se convertirá en agente libre y esta controversia podría afectar negativamente su búsqueda de un contrato lucrativo.
Desde 2015, las Grandes Ligas han implementado una política de violencia doméstica para abordar casos como este. Esta política permite iniciar investigaciones y aplicar sanciones a los peloteros involucrados en actos de violencia doméstica, independientemente de si enfrentan cargos legales. La investigación comienza tan pronto como un jugador es arrestado o denunciado, y se coloca en una lista restringida que lo excluye de las actividades del equipo durante al menos siete días. El comisionado decidirá las sanciones una vez que concluyan las investigaciones.
Urías se une a una lista de jugadores de las Grandes Ligas que han enfrentado sanciones por violencia doméstica. Aunque algunos, como Yasiel Puig y Miguel Sanó, evitaron la suspensión, otros, como Aroldis Chapman y Trevor Bauer, recibieron castigos significativos, incluyendo juegos sin goce de sueldo.
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El caso de Bauer es particularmente notable, ya que enfrentó una suspensión inicial de 324 juegos, que luego se redujo a 194. Sin embargo, los Dodgers lo liberaron a principios de este año. Otros jugadores también han perdido un número considerable de juegos debido a actos de violencia doméstica, lo que resalta los riesgos que enfrenta Urías en este proceso.
Julio Urías, quien ha sido una figura destacada en el mundo del béisbol, se encuentra en una situación incierta que podría tener un impacto duradero en su carrera.
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