Guanajuato.- Horas antes de que se registrara el asesinato de siete jóvenes en la plaza principal de la comunidad de San Bartolo de Berrios, en San Felipe, Guanajuato, se realizaba un festejo con motivo del 10 de mayo. El evento fue organizado por la parroquia, según confirmó la Arquidiócesis de León.
Cabe mencionar que las familias de los siete jóvenes participaban activamente en las actividades de la parroquia “Nuestra Señora de Guadalupe, Reina de los Apóstoles”.
A través de un comunicado, el arzobispo de León, Jaime Calderón Calderón, exhortó a las autoridades a dar con los responsables y buscar justicia, para que estos hechos no continúen ocurriendo en ningún lugar.
“Pero en contraste con lo buena y generosa que es la mayoría de la gente que vive en estas tierras del Bajío, también soy consciente de una realidad que la flagela y la daña. Me refiero a la violenta disputa de territorio de los cárteles, en la cual se han perdido muchas vidas de personas inocentes”, escribió Jaime Calderón Calderón.
La Arquidiócesis de León pidió una respuesta pronta ante este hecho y exigió que se detenga la violencia que siguen sufriendo las familias guanajuatenses.
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