La Procuraduría Federal del Consumidor calibró a través de su programa de verificación de instrumentos de medición más de mil 500 básculas en León.
José Huerta Arredondo, delegado de la PROFECO en Guanajuato informó que durante 5 meses que se realizó este programa se atendieron locales de los diferentes mercados en la ciudad, así como estacionamientos, tiendas de abarrotes y autoservicio, señaló que existió un gran interés por parte de los propios comerciantes para calibrar sus básculas, relojes entre otros.
Agregó que las multas mínimas por no calibrar va desde los mil 300 pesos, aunque también depende de la capacidad de la báscula y de la capacidad de pago del propietario.
Finalmente indicó que el costo por verificar una báscula sencilla va desde los 220 pesos hasta los 5 mil 500 pesos según la capacidad de la misma, por lo que exhortó a aquellos que no lo han hecho acudan a la delegación de Profeco a hacer la verificación para evitar alguna multa posterior.