El decir que el nuevo sistema de justicia penal sea una ‘puerta giratoria’ para los delincuentes es una excusa de los gobiernos para eximirse de su responsabilidad, y no reconocer que no están haciendo bien su trabajo, aseguró el extitular de la PGR y exjuez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Sergio García Ramírez.
El doctor en Derecho apuntó que aún es muy pronto para emitir un juicio global sobre el nuevo sistema de justicia, pero rechazó que éste sea factor para explicar el incremento de la incidencia delictiva en Guanajuato y en el país.
No debemos irnos con la idea de que el sistema por sí mismo está generando un incremento en la delincuencia, de ninguna manera, porque esto es una forma de sustraerse de la responsabilidad de quienes tienen que combatir la delincuencia, previniéndola y controlando la ola de criminalidad que nos perturba, no se vale echarle la culpa al sistema de lo que no se hace en otros espacios del quehacer público”, dijo en entrevista.
Subrayó que el hecho de que ciertos inculpados puedan seguir su juicio en libertad, no significa su absolución o que sea inocente, y destacó que de esta forma además el Estado tiene ahorros considerables.
Sin embargo, García Ramírez señaló que dos de los principales puntos débiles del nuevo sistema son las corporaciones policiales debilitadas y sin la preparación necesaria, además del sistema penitenciario.
Hay protagonistas del sistema, protagonista es el ministro de la Suprema Corte, es el juez que dicta sentencia, pero también son protagonistas las fuerzas de la policía y los reclusorios y ahí hay fallas enormes, y llevamos años y años y años de estar esperando soluciones drásticas e importantes pero esto que estoy diciendo no es de ninguna manera un descubrimiento, la sociedad sabe, y el propio Gobierno de la República ha reconocido que hay un déficit en seguridad pública muy grande y que no se ha podido avanzar gran cosa en materia de policía”.
Respecto al aumento de la violencia en Guanajuato relacionada al crimen organizado, el exprocurador General de la República sostuvo que no es un fenómeno exclusivo de esta entidad, y señaló ante corporaciones policiales débiles y en crisis, el Ejército es el que tiene que combatir este problema, aunque no sea su función.
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