Un pequeño de tres años se perdió el martes pasado en el bosque de Carolina del Norte cuando jugaba con otros niños en la casa de su abuela.
De acuerdo a información del periódico Boston Herald, el menor estaba al cuidado de su abuelita pero en un descuido el niño desapareció.
En cuanto se dieron cuenta que Casey no estaba cerca, más de 600 voluntarios y elementos del Cuerpo de Marines y del FBI implementaron un fuerte operativo para encontrarlo sano.
Después de dos días lo encontraron escondido en un arbusto espinoso, a unos 800 metros de donde se había perdido, no había comido ni bebido agua, además estuvo expuesto a temperaturas cercanas a los 0 grados centígrados.
Lo que más sorprendió a su familia fue que cuando el niño regresó a su casa le platicó a su tía Breanna que su mejor amigo el oso estuvo siempre a su lado para mantenerlo a salvo.
Las autoridades descartaron secuestro.
Discussion about this post