México, – La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) sometió a una evaluación física y psicológica a 275 controladores de vuelo, 230 activos, para evitar catástrofes aéreas, informó la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Los controladores se sometieron a pruebas de inteligencia, personalidad y funciones neurocognitivas, dijo en una entrevista con la agencia el titular de la dirección general de Protección y Medicina Preventiva en el Transporte (DGPMPT) de la SCT, José Valente Aguilar Zinser.
La investigación, que se hace desde hace dos años, evalúa la capacidad adaptativa de los controladores mediante la exploración de herramientas neuropsicológicas, con la creación y uso de un protocolo ideado por la misma dirección de la SCT, agregó.
Como parte de los resultados obtenidos se presentaron cinco grupos, el primero, integrado por 74 individuos clasificados como aptos y recomendables, registró un cociente intelectual de 125 a 143 puntos, por encima del promedio.
Además, este primer grupo presentó marcadores normales en la prueba Inventario Multifásico de Personalidad de Minnesota 2 (MMPI-2) y la prueba Neuropsi.
El segundo grupo, de 77 controladores, registró un cociente intelectual de 100 a 120 y pruebas MMPI-2 y Neuropsi normales, por lo que es personal clasificado como apto recomendable.
El tercer grupo, de 50 controladores, incluye personal con inteligencia debajo del promedio y con resultados normales en la prueba Neuropsi, por lo que no es recomendable, puntualizó.
En tanto, el cuarto grupo, de 17 personas, no es apto por presentar una prueba anormal y alteraciones en la personalidad y el quinto grupo se descartó como recomendable por presentar causas médicas no favorables, sostuvo.
Los datos arrojados indican que cinco por ciento de los controladores tiene una personalidad psicopática, es decir, son individuos que se tienen que descartar porque no sienten culpa y no tienen intereses más que los propios, detalló Aguilar Zinser.
Esta prueba eliminó a un grupo importante luego de aplicarse las pruebas de personalidad, indicó el funcionario, quien agregó que los resultados son el inicio de la aplicación de esta herramienta que se debe aproximar a las situaciones reales.
“Este trabajo inicial, que a lo largo de los años ha sido evaluado, da para mucho tiempo; la información tiene que ser procesada y comparada año con año”, dijo el funcionario de la SCT.
“Tenemos que recomponer nuestros parámetros y administración de riesgo en la elección de las personas que van a operar en condiciones nuevas y diferentes que exigen una adaptabilidad. Tenemos que aprender a medir el riesgo”, añadió.