Bolivia ingresó este domingo en una cuarentena total que estará vigente durante 14 días, con el propósito de frenar la pandemia del nuevo coronavirus, que ya registra 24 casos en el país sudamericano.
De acuerdo con la determinación, centros de abastecimiento y mercados estarán abiertos por las mañanas hasta las 12:00 hora local (16:00 GMT), en que solo una persona por familia podrá salir de casa para hacer las compras.
La mayoría de los casos de COVID-19 en Bolivia se registran en el departamento de Santa Cruz (centro) con 13, seguido de Oruro (este) con ocho, Cochabamba (centro) con dos y La Paz (este) con uno.
El ministro de Salud del gobierno interino apoyado por la oposición, Aníbal Cruz, confirmó este domingo en conferencia de prensa cuatro nuevos casos positivos de COVID-19 en el país, todos ellos en Santa Cruz.
A su vez, el ministro de Defensa, Fernando López, se refirió a las personas que incumplen la cuarentena.
¡No puede ser! No puede ser que mientras unos bolivianos arriesgan sus vidas, otros lo tomen a la ligera”, afirmó.
Dijo que el comportamiento de la gente no “es el ideal. No nos alcanza con el 98 % de inamovilidad, vamos a derrotar al coronavirus solo con el 100 % de cumplimiento de la medida”, expresó López.
La cuarentena aplicada en el país a partir de este domingo abarca al transporte, público y privado, que quedó suspendido.
Se han habilitado, no obstante, permisos para transportar trabajadores, cuyas empresas deben seguir funcionando, así como para personas que laboran en servicios de salud, medios de comunicación y otras áreas indispensables relacionadas con agua, electricidad y gas.
Centros de producción y transporte de mercancías de la canasta familiar seguirán funcionando de manera normal, mientras que la banca continuará con su atención.
Farmacias, hospitales y centros de salud estarán abiertos de manera normal y en alerta.
En el país se registran este domingo calles desiertas, negocios cerrados y actividades sociales suspendidas.
Se registran también mensajes de solidaridad a través de las redes sociales, con personas en busca de aprovisionarse de alimentos en centros de abasto.
En algunas regiones del país se han presentado incidentes en que la gente se resiste a acatar la medida.
Imágenes de televisión han mostraron calles desiertas, comercios cerrados y plazas vacías, pero con mercados abiertos donde se observaron filas de gente para comprar alimentos.
“En los mercados no hay control. La gente viene con sus familias, no está a más de un metro de distancia. Hay mucha gente que transita y puede ser transmisora del virus”, comentó una ama de casa.
El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, indicó que la medida se cumple en más del 90 por ciento en todo el territorio boliviano y que serán rigurosos en hacer cumplir lo dispuesto por el decreto de emergencia sanitaria.
Murillo lamentó el reporte de casos aislados en que no se acató la medida y ratificó que serán implacables con los infractores, quienes deberán pagar una multa de 500 bolivianos (72 dólares) y un arresto de ocho horas.
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