El exasesor de Seguridad del Municipio y diseñador del Modelo de Proximidad y de Justicia Cívica, Bernardo León Olea, dijo que por decisión propia decidió terminar anticipadamente, a cuatro meses de lo inicialmente pactado su contrato con el Municipio.
En entrevista telefónica, dijo que obviamente, no cobró los meses que faltaron y el dinero se quedó en el Fifosec. La razón de la terminación anticipada fue que ya estaba todo el trabajo hecho y no era necesaria su presencia en la ciudad.
León Olea dijo que lo que estuvo a su alcance, lo hizo y que había cosas del modelo que ya no dependían de él sino del personal operativo.
“De todo lo que propusimos en el modelo, el 100% de las cosas que propusimos se están haciendo; el tema aquí es la intensidad, el chiste es que el modelo se aplique, digamos, hasta sus últimas consecuencias, porque esto le da mucho poder a la Policía”.
Defendió el modelo pues no hay ninguna parte que no esté estructuralmente puesta: los indicadores, las encuestas, una mucho mejor relación con la Fiscalía General y se están recibiendo denuncias aunque no en el volumen que podría tenerse.
Apuntó que también está la unidad de investigación que trabaja con el Ministerio Público, ha aumentado el número de policías en el balance entradas y salidas, los protocolos que se necesitan y los juzgados cívicos.
No obstante, dijo que ello no es suficiente porque el modelo debe implementarse hasta sus últimas consecuencias para sacarle un mejor provecho.
“Menos criminales, menos delitos, no es ningún descubrimiento científico muy complicado, entonces, en esa medida León podrá ir teniendo disminuciones importantes de la criminalidad (…) hay que llevarlo hasta sus últimas consecuencias”.
Expuso que el modelo también se implementa en ciudades como Oaxaca, Jalapa, Colima, Monterrey y Guadalajara y lo entregó en el gobierno federal aunque ahí no cobró un centavo.
