El ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, reiteró hoy que si Cataluña (noreste de España) se independiza, sus ciudadanos perderán la nacionalidad española.
En declaraciones en Barcelona, el canciller explicó que si una parte de España sale del país para crear un Estado “es que se va con todos los atributos que le daba la pertenencia a ese otro país, no para quedarse con unas cosas sí y otras no”.
Con ello, García-Margallo explicó la versión del gobierno español ante la polémica desatada de cara a las elecciones en Cataluña el 27 de septiembre, en que la candidatura independentista de “Juntos por sí”, podría ganar muy cerca de lograr la mayoría absoluta.
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, evitó la víspera dar explicaciones jurídicas sobre qué pasaría con la ciudadanía española de los catalanes si se concreta la independencia.
Esa omisión fue aprovechada por el presidente de la Generalitat de Cataluña y candidato por “Juntos por el sí”, Artur Mas, que consideró que todas las hipótesis que el gobierno español plantea de pérdida económica y de nacionalidad si se consigue la independencia “son mentira”.
Ante esto, el canciller español sostuvo que el ejemplo de los países latinoamericanos es claro cuando al declararse independientes dejaron de estar bajo la tutela de la Constitución de Cádiz, y que algo similar ocurriría con Cataluña en caso de ser independiente.
“Si a lo que proponen los que plantean la ruptura es a una república independiente de siete millones de ciudadanos, ¿todos con nacionalidad española?. Es un poco absurdo, ¿no?. Si uno se va, es que se va; no se va para quedarse con unos atributos sí y otros no”, enfatizó.
Abundó que eso mismo ocurrió cuando Argelia, que era departamento francés, pidió la independencia de Francia, “perdieron la nacionalidad francesa y la ciudadanía europea”.