En plena tormenta por acusaciones de fraude en Estados Unidos en las pruebas de emisiones de gas, la alemana Volkswagen enfrenta una eventual acción de Brasil, uno de los mayores mercados mundiales de la empresa, por los mismos motivos.
De acuerdo al local diario económico Valor, el Ministerio de Medio Ambiente brasileño va a pedir aclaraciones a la empresa –tercer mayor constructor de autos del país- para esclarecer si hubo fraude en la medición de emisiones de sus autos en Brasil.
Aunque los autos con motor diesel –los afectados por el escándalo- son poco populares en Brasil, donde dominan los motores híbridos a base de gasolina y etanol, las autoridades brasileñas quieren saber si hubo pruebas fraudulentas por parte de Volkswagen, empresa que vendió de enero a septiembre 205 mil autos en Brasil.
El grupo alemán, icono del músculo industrial del país europeo, anunció la víspera una provisión de siete mil 200 millones de dólares para afrontar eventuales multas por parte del regulador estadunidense, el primero en denunciar el fraude, mientras otros países estudian abrir acciones legales contra la compañía.
En tanto, la canciller federal de Alemania, Ángela Merkel, exigió la víspera “transparencia total” en el escándalo de Volkswagen, que ha admitido haber manipulado los datos de emisiones contaminantes en algunos de sus modelos diesel.