Inglaterra regresa al confinamiento severo.
Así lo anunció el primer ministro británico, Boris Johnson, este lunes en un mensaje a medios de comunicación.
La pandemia está descontrolada y se agravó todavía más con la propagación de la nueva cepa, que es de más fácil transmisión.
“Los hospitales están bajo más presión que en ningún momento desde el comienzo de la pandemia”, señaló Johnson en un discurso.
Las escuelas de todos los niveles tendrán que cerrar y atender sus programas educativos en línea.
Los restaurantes también cerrarán, así como todos los comerciales de actividades no esenciales.
De casi una semana para acá, Inglaterra ha registrado la alarmante cifra de más de 50 mil contagios por día, ni siquiera detectados en la primera oleada.
Johnson estimó regresar a trabajar a mediados de febrero “si no cambia nuestro conocimiento del virus, si la vacunación sigue siendo exitosa, si las muertes empiezan a bajar y si todo el mundo juega su papel cumpliendo las reglas”.