El presidente de la CMIC en Guanajuato, Enrique Aranda Anaya, pidió a los municipios y al gobierno del estado que el monto que contraten de obra pública, busquen distribuirlo entre la mayor cantidad de empresas posibles.
Lo anterior, luego de señalar que si bien en 2020 se ejerció 34% más recurso en proyectos de infraestructura pública en Guanajuato en comparación con 2019, se generaron menos empleos.
Esto se debe, dijo, a que una cantidad importante del presupuesto se concentró en grandes obras, y por ende, fueron pocas empresas las que ejercieron ese recurso.
Añadió que mientras al cierre de 2019 el sector de la construcción en el estado reportó 69 mil 659 puestos de trabajo ante el IMSS, el año pasado la cifra cayó a 62 mil 607, es decir, 10.2% menos.
“Necesitamos más contratos de menor monto, pero para más constructoras. Definitivamente la base de la pirámide de la industria son empresarios que facturan menos de 10 millones de pesos al año, y después empezamos a ver más empresas de mayor facturación y luego vienen las grandes empresas. Ahí es donde debemos tener una estrategia para que todos tengamos trabajo y que existan más oportunidades de concursos y proyectos”, dijo.
Enrique Aranda, quien asumió las riendas de la CMIC en el estado el pasado lunes, indicó que por ello, es necesario que el recurso que falta por ejercer del crédito autorizado el año pasado al gobierno del estado, así como el próximo empréstito que está en trámite, se distribuya en la mayor cantidad posible de empresas constructoras.
“Guanajuato tiene un alto grado de calificación en la industria de la construcción, tenemos muy buenos técnicos, empresas muy calificados, con muchas certificaciones, horas de capacitación, y estamos viendo tristemente que estas empresas están dejando ir a personal con muy alto grado de especialización, y creo que de eso nos vamos a arrepentir en el futuro”, dijo.