Si bien la religión católica se mantiene como la principal en Guanajuato, el último censo del INEGI revela que ha perdido arraigo entre sus habitantes, mientras que en contraparte creció el número de personas que no profesan credo alguno o pertenecen a cultos populares.
En 2020, según el INEGI, en el estado había poco más de 5.6 millones de católicos, lo que representa el 91% del total de su población (casi 6.2 millones de habitantes).
Sin embargo, en el censo levantado en 2010, 94 de cada 100 guanajuatenses eran seguidores de la Iglesia Católica.
Esta disminución en la proporción de católicos en el estado es palpable también en sus tres municipios más grandes.
Hace 10 años en León el 94% de su población se reconocía como católica, mientras que en el último censo, el porcentaje disminuyó a 90, que representan 1 millón 554 mil personas.
En el mismo lapso, en Irapuato pasaron de representar el 92% a el 89%, mientras que en Celaya bajaron del 91 al 88%.
En contraparte, la proporción de guanajuatenses que afirman no profesar ningún credo se duplicó: en 2010 representaban el 1.4% de la población, y en 2020 significaron el 3%, es decir, alrededor de 191 mil personas.
De igual manera, creció nueve veces la cifra de seguidores de cultos populares, como el culto a Jesús Malverde, la Iglesia Fidencista Cristiana -seguidores del curandero conocido como Niño Fidencio- y el culto a San Pascualito. Estas veneraciones suman 1 mil 124 adeptos en Guanajuato.
No obstante, la segunda iglesia con más seguidores en la entidad sigue siendo la cristiana, con 177 mil 050, seguido por los Testigos de Jehová -40 mil 173- y la Evangélica -21 mil 892-.
En tanto, de otras grandes religiones a nivel mundial, hay pocos adeptos en Guanajuato. Por ejemplo, solo hay 788 judíos, 239 musulmanes y 1 mil 276 budistas, aunque en este último caso se triplicó la cifra en comparación con el 2010.