La Alianza de Maestros en Guanajuato se posicionó a favor de que el regreso a clases presenciales se decida con base en las condiciones particulares de cada región y de cada escuela, además de que se considere la covid-19 como riesgo de trabajo para los maestros.
En conferencia de prensa virtual, Teresa Paulino San Germán, delegada de la organización en el estado, señaló que es necesario que la autoridad considere el contagio en los maestros como riesgo de trabajo y que se les brinden todas las medidas y condiciones de protección, tanto de salud como laborales, en favor de ellos y sus familias.
Además, indicó que no es adecuado pensar que la decisión se pueda tomar de forma homogénea desde el gobierno federal o estatal, pues mientras hay escuelas que sí cuentan con las características e insumos necesarios -principalmente en el sector privado-, hay muchas otras en las que no.
“Yo he insistido mucho en que se particularice esta decisión, que no sea una decisión federal o estatal que a todos aplique. El piloto que se llevó a cabo en Guanajuato tuvo más o menos un buen funcionamiento, pero no es lo mismo trabajar con unos cuantos planteles que ya con todos, entonces habría que dialogar mucho entre las autoridades sanitarias, de educación y los colegios, directivos, para ver en qué casos sí hay condiciones y en cuáles no”, dijo.
