El único detenido de uno de los último asesinatos cometidos en León ya está ante el Juzgado Regional de Oralidad para que sea resuelta su situación jurídica como probable implicado en el asesinato de Ampliación Medina, mientras tras asesinatos más se suman a la cuenta de casos sin resolver, solo en el transcurso de 24 horas.
Este domingo fue puesto a disposición del Juzgado mencionado el hombre detenido el pasado fin de semana tras de que fuera asesinado por un comando armado, a la puerta de su casa en la calle Mora, Gerardo Botello, de 31 años, el único capturado, Sergio de 22 años de edad, detenido minutos después del crimen con un auto Mazda y al menos un arma de fuego en su poder.
Este lunes un juez de control analizará la detención que se hizo de él para determinar si fue legal y dar paso a la imputación de delito.
Para la Procuraduría General de Justicia, Sergio fue integrante de un grupo de criminales armados que la madrugada del sábado pasado tocó a la puerta de Gerardo Botello y al abrir este su puerta, fue asesinad.
En lugar fueron encontrados casquillos de dos armas de alto poder y una pistola.
Por otra parte, este domingo contabilizó dos asesinatos más cometidos también por pistoleros y en los que no hay detenidos ni identidad de los criminales.
Cruz Israel fue acribillado a balazos y perdió la vida cuando ya recibía atención médica, mientras María Margarita de 36 años y César Armando de 21 a resultaron heridos, en un ataque consumado la noche del domingo en Lago de Camécuaro y Privada de Padua, en Lomas de la Trinidad.
Los responsables sería delincuentes que se desplazaban en un vehículo, pero escaparon y no se conoce su identidad.
Tampoco hay detenidos ni pistas de quienes dieron muerte a un hombre y arrojaron su cadáver en el camino a Nuevo Valle en la zona del poblado de Alfaro.
La víctima no ha sido identificada: fue un hombre de entre 35 y 40 años de edad; delgado, llevaba un arete dorado en la oreja izquierda y tiene tatuada la cara de Jesucristo, la muerte e imágenes de cholos en la espalda, así como una calavera o momia en el brazo izquierdo.
Fue muerto de seis balazos, según las autoridades investigadoras.
Las autoridades no tienen ni pista de dónde fue muerto y por quiénes.
Un caso más, ocurrido ya la madrugada de este lunes, fue descubierto en Mariano Escobedo y Juan Alonso de Torres alrededor de las tres de la madrugada.
Un hombre de enre 25 y 30 años, vestido sólo con pantalón, bóxer y tenis, fue asesinado a puñaladas, que le fueron asestadas en la espalda.
Los indicios señalan que fue apuñalado en el mismo lugar, pero el cuerpo no ha sido identificado y no se sabe quién lo mató.
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