La Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires aprobó hoy la Ley de Paridad de Género que obligará a que los partidos postulen igual número de hombres y mujeres en las elecciones legislativas del próximo año.
Diputadas y diputados de todas las fuerzas políticas apoyaron así una reforma electoral que le pone presión al Congreso nacional, órgano que aún está debatiendo una norma que busca aumentar la participación de las mujeres en la política.
La nueva legislación establece que “las listas de candidatos deberán respetar para los cargos de cuerpos colegiados en todas las categorías una equivalencia de 50 por ciento del sexo femenino y otro 50 por ciento del sexo masculino”.
También explica que este porcentaje “será aplicable a la totalidad de la lista, la que deberá cumplir con el mecanismo de alternancia y secuencialidad entre sexos por binomios”.
Esto significa que las listas de candidatos al Senado y a la Cámara de Diputados deberán estar integradas sucesivamente por una mujer y un hombre, lo que evitará que las mujeres sean relegadas a los últimos lugares.
Con esta reforma, Buenos Aires se convierte en la cuarta provincia que aprueba la Ley de Paridad de Género, misma que ya aplica en Santiago del Estero, Córdoba y Río Negro.
La inclusión femenina en los cargos de poder ha sido impulsada este año a través de la campaña “Mujeres a la política” que lanzaron partidos y grupos feministas con el respaldo de Amnistía Internacional, entre otras organizaciones.
Actualmente el 61.5 por ciento de las curules de la Cámara de Diputados están ocupadas por hombres y el 38.5 por ciento, por mujeres, mientras que en el Senado la proporción es de 58.3 por ciento de hombres y 41.7 por ciento de mujeres.
Hasta ahora, a nivel nacional rige una ley de cupo que obliga a los partidos a que 30 por ciento de sus listas sean ocupadas por mujeres, pero ellas plantean la necesidad de una equidad ya que representan a la mitad de la población.
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