La aviación rusa atacó 86 posiciones del yihadista Estado Islámico (EI) en Siria durante 88 incursiones en las últimas 24 horas en las provincias de Raqqa, Hama, Idlib, Latakia y Alepo, informó hoy el Ministerio de Defensa de Rusia.
Entre los objetivos atacados figuran puestos de mando, instalaciones de almacenamiento de armas y sitios donde los yihadistas fabricaban explosivos, precisó a la prensa el vocero de la cartera de Defensa, Igor Konashenkov.
Según conversaciones de los yihadistas interceptadas en las provincias de Hama y Homs, los combatientes carecen de municiones y armamento pesado, por lo que algunos comandantes del EI han amenazado con salir de la zona de combate si en un futuro próximo no son abastecidos.
El EI ha cambiado de táctica a la hora de suministrar armas y municiones a la línea del frente: ahora las caravanas de camiones se mueven por la noche, indicó el portavoz del Ministerio de Defensa, citado por el sitio informativo ruso Sputnik.
De acuerdo con Konashenkov, el EI trata de hacer llegar combustible y munición desde Raqqa, su principal bastión en Siria y capital de su autoproclamado califato, mediante “vehículos que circulan fuera de las carreteras principalmente por la noche”.
Gracias a los “drones” con que cuenta en Siria, la aviación rusa sigue los movimientos de estos grupos y está registrando las rutas y los puntos de entrega situados en llanuras y zonas montañosas, explicó.
Desde el pasado 30 de septiembre, Rusia lleva a cabo ataques aéreos contra posiciones del EI en Siria y desde entonces ha realizado más de 300 vuelos, eliminando a casi 300 militantes y destruyendo numerosos campos de entrenamiento, puestos de mando y depósitos de municiones.