La comisionada de la Unidad de Análisis y Estrategia para la Seguridad Ciudadana del estado, Sophia Huett López, aseguró que el aumento de las extorsiones en Guanajuato es un reflejo de la desesperación de grupos criminales por obtener nuevas fuentes para allegarse de dinero, ante el congelamiento de algunas de sus cuentas bancarias.
Explicó que esta desesperación los ha orillado en municipios como Celaya, Villagrán y Salamanca a realizar extorsiones directas, es decir, que una persona se acerca directamente al comerciante o empresario para tratar de extorsionarlo, lo que facilita su identificación y detención.
“Sin duda, el tema de las extorsiones directas y como se está dando en estos municipios tienen que ver con esta necesidad, e incluso hablaría de desesperación, que tienen las organizaciones delictivas por allegarse de recursos porque es mucho más sencillo detectarlos y detenerlos cuando cometen este tipo de delitos de forma presencial, sí es un tema de una medida de desesperación de estas organizaciones delictivas por seguir obteniendo recursos”, dijo.
Además, indicó que un efecto colateral de los golpes a las finanzas de las agrupaciones criminales es que disminuye su capacidad de atraer a nuevos integrantes a su organización.
“Es pegarles donde más les duele porque entonces dejan de tener dinero para pagar esa nómina, esta economía criminal que han sostenido, y eso también permite que no puedan cooptar a nuevos integrantes porque lo que ellos hacen, particularmente con los jóvenes, es mostrarles la gran vida que se pueden dar con recursos económicos y a los cuales están invitando, cuando el joven ve a un criminal sin dinero, es mucho menos atractivo”, dijo.
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