Un gran cortejo fúnebre escoltado por Elementos de Tránsito a bordo de moto-patrullas, condujo el cuerpo de Héctor Jesús Godínez Hernández hasta el Panteón Municipal, donde se celebró una misa de cuerpo presente en su honor y posteriormente su sepultura.
Los claxon, las torretas, las sirenas encendidas comenzaron a sonar desde las 11:00 de la mañana, momento en que el contingente salió desde la calle Ignacio Tejada ubicada en la colonia León 2, donde Héctor vivía con su familia y donde su cuerpo fue velado desde la madrugada de este miércoles que llegó a esta ciudad procedente de Celaya.
El largo y concurrido cortejo integrado también por varios conductores de taxis ejecutivos, se dirigió sobre el bulevar Mariano Escobedo hacia Juan Alonso de Torres, Antonio Madrazo, Guanajuato y Lucero hasta llegar al Panteón Municipal de la colonia Las Trojes donde será su última morada.
Conductores de autos y camiones se sumaban con los claxon de sus vehículos a la despedida, triste despedida de este hombre que tenía 12 años como elemento activo en la corporación, los mismo 12 años que tenía de matrimonio y que se consolidaron a la par.
Este hombre de 33 años ya no jugara más con sus hijos pero como dijo el sacerdote durante la misa, su ejemplo seguirá en ellos como una huella imborrable, su esfuerzo por darle una mejor calidad de vida a su familia lo motivaba a tener más de un trabajo, por ello su decisión de ingresar como chófer de taxi ejecutivo.
Al finalizar de la ceremonia religiosa se formó una valla humana en la cual se alternaron un elemento de Tránsito y un conductor de taxi ejecutivo para abrir paso al traslado del féretro café, hasta donde sería depositado.
Una triste y dolorosa despedida, la cara desencajada y la mirada perdida de Luisa su esposa, pero lo más doloroso era ver a la madre de Héctor, gritarle a su hijo que no se fuera, que tenía que volver como se lo prometió, que tenía que regresar su chiquito.
Llantos, desmayos y de repente una fuerte ovación para este hombre que murió fuera de su ciudad natal hizo enmudecer a los presentes, a familiares, amigos y compañeros de trabajo de Héctor Jesús Godínez Hernández quienes al unisono aplaudieron para decirle adiós.
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