Las fuerzas afganas se preparaban hoy para la recuperación de la norteña ciudad de Kunduz, que cayó la víspera en control del Talibán, una acción ya apoyada por la aviación de la Alianza Atlántica (OTAN).
En tanto, en la oriental provincia de Nanganhar combatientes del Estado Islámico (EI) siguen atacando posiciones gubernamentales en el distrito de Achin por segundo día consecutivo.
Los soldados afganos se encuentran en el aeropuerto de Kunduz y otras partes de la ciudad, a fin de cercarla y expulsar de ella a los militantes del movimiento islámico fundamentalistra del Talibán, que gobernó ese país en la última década del siglo pasado.
Reportes de oficiales afganos señalaron que este lunes tomó alrededor de 14 horas a los talibanes hacerse de la zona céntrica de Kunduz, sin embargo ya se cuenta con los refuerzos suficientes para recuperarla, dijo el comandante Murad Ali Murad citado por Tolo news.
Por lo pronto la Alianza Atlántica realizó la madrugada de este martes un bombardeo sobre posiciones talibanes a las afueras de Kunduz.
Previo al ataque aéreo, los elementos afganos habían recuperado el cuartel de la policía y la cárcel, de donde habrían sido liberados cientos de prisioneros, entre ellos varios talibanes.
El ataque contra Kunduz ocurrió en el primer aniversario del gobierno de unidad nacional que encabeza el primer ministro Abdullah Abdullah, quien se encuentra en Nueva York en la sede de Naciones Unidas, pero canceló su agenda para regresar al país.
En tanto, en la provincia de Nanganhar, fronteriza con Pakistán, los ataques del EI se centran en el distrito de Achin, donde comenzaron este martes a las 3:00 horas (22:30 GMT del lunes).
Un balance provisional señala que han caído unos 40 combatientes islámicos y tres soldados afganos.
El presidente afgano Ashraf Ghani advirtió la seriedad de la amenaza que representa el EI en el país, y pidió a la vecina Pakistán que persiga por igual a todos los grupos terroristas.
Pakistán debe combatir por igual a aquellos grupos que lo amenazan y que significan también un peligro para Afganistán, señaló citado por Khaama Press.