León.- En su visita a la ciudad de León, Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz, hizo un llamado para que, las autoridades mexicanas, se quiten la venda de los ojos y reconozcan la existencia de narcoestados para generar estrategias enfocadas en la disminución de la violencia.
La activista guatemalteca subrayó que, para ello, es necesaria la creación de instancias que tengan la capacidad de controlar la situación, a través de la creación de nuevas políticas públicas ya que, desde su punto de vista, no todo está perdido en este tema.
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“Hay corporaciones que se han ido armando y que usurpan los poderes. Hace una década no era aceptable, para los análisis políticos, que habláramos de narcoestados. Pero, hoy por hoy, deberíamos quitar esa capucha de estado para tratar de empezar a visualizar los narcoestados, porque no es una responsabilidad civil que armas de alto poder estén en manos de personas fuera de la ley”, dijo Rigoberta Menchú.
Por otro lado, también resaltó la importancia de que las autoridades eviten realizar promesas de paz incumplibles y, en su lugar, revisar de dónde vienen los conflictos para poder impulsar estrategias reales.
“Creo que es responsabilidad de los estados, los poderes de estado, intentar impulsar, realmente, llamados creíbles para la población, llamados que sean realizables y no hacer promesas de paz que no se cumplen porque, cuando se hace una promesa de paz y no se cumple, realmente la avalancha de crítica viene a la frustración”, señaló.
Rigoberta Menchú recibió el Premio Nobel de la Paz en el año 1992, convirtiéndose en la primera persona indígena en recibirlo. Estuvo en León para participar en las actividades del segundo Encuentro Iberoamericano Voces por la Paz.
/LT
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