Japón informó que este 2023 verterá al mar más de un millón de toneladas de agua contaminada procedente de la central nuclear de Fukushima, donde se originó el peor accidente nuclear en 2011 desde el registrado en la central ucraniana de Chernóbil, en 1986.
De acuerdo con el Organismo Internacional de Energía Atómica afirmó que la medida aprobada en 2021 es segura, a pesar de que los países vecinos han expresado su preocupación.
Las aguas fueron procesadas para que presenten bajos niveles de radioactividad que están dentro de las normativas nacionales de las autoridades de aquel país.
La acción se podría llevar a cabo entre la primavera y el verano, cuando se reciba un informe exhaustivo del OIEA, de acuerdo con el secretario jefe del Gabinete, Hirokazu Matsuno.
Diariamente la central produce 100 m3 de agua contaminada, que es una mezcla de agua subterránea, agua de mar y agua utilizada para mantener fríos los reactores. Las instalaciones cuentan con 1.3 millones de metros cúbicos pero el espacio se está agotando.
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