Empresarios tortilleros en el estado se comprometieron públicamente a mantener un precio no mayor a los 15 pesos en el kilogramo de tortilla en lo que resta de enero mientras se agotan sus inventarios de insumos adquiridos a finales de 2016.
Así lo dio a conocer Catarino Cervantes Zermeño, secretario de la Federación de Industriales de la Masa y la Tortilla en el Estado quien advirtió que ya para febrero será imposible, mantener el mismo precio aunque no podrá llegar a los niveles de 18 o 20 pesos que se maneja en algunas partes del país.
No obstante, Cervantes Zermeño dijo que una de las batallas que libran los tortilleros es para que el gobierno federal reforme la ley para establecer mayores candados a la comercialización en la calle (tiendas de abarrotes y autoservicio) que les genera la devolución de entre un 8 y 10% del producto.
Estamos solicitando al gobierno federal la actualización de esa norma y que se defina perfectamente qué dependencias van a aplicar esta norma, para que no incurramos en costos extraordinarios más que los que son de la producción y no la comercialización, y de esa manera le vamos a dar a las personas un precio accesible, porque ahorita vemos 18 o hasta 20 pesos”
Uno de los puntos importantes de esta reforma implicaría establecer como condición que para la venta en este tipo de lugares, la tortilla se ofrezca solo en frío y en envase biodegradable.
El líder de los tortilleros también cuestionó que son los acaparadores del maíz quienes provocan los incrementos en el costo de producción pues mientras la autoridad supervisa a 3 mil 500 tortillerías son 10 o 15 acaparadores del producto los que adquieren el producto a precios bajos y lo venden a los industriales de la masa y la tortilla hasta en 3 veces su valor.
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