‘Nacho’ Ambriz dejó entrever que hay positivos de covid en su plantilla, aunque no modifica en nada la estrategia para enfrentar a Chivas.
En medio de tanta incertidumbre y de confirmaciones de casos positivos por covid-19 en el futbol mexicano, el León vive cierta tensión debido a las últimas noticias, en específico porque este miércoles realizaron las pruebas del virus y estuvieron expectantes de los resultados.
Fue precisamente este jueves cuando tuvieron la confirmación de los mismos, en donde se arrojaron algunos positivos, uno de acuerdo a lo que trasciende, y que el propio Ignacio Ambriz dejó entrever en conferencia de prensa virtual.
“Se vive con una incertidumbre muy fuerte, el martes estábamos platicando con la directiva y nerviosos por saber los resultados del examen. Ya se dio el aviso a la Federación, yo lo único que puedo decir es que lo que esperábamos, estamos contentos y estamos bien. Una gran parte estamos de lo no esperado por la situación tan complicada, estamos contentos por los resultados”, dijo el técnico esmeralda.
Será este jueves por la noche cuando la Liga comparta el comunicado oficial de las pruebas realizadas por los Esmeraldas, que enfrentarán al ‘Chiverío’, equipo que tiene además de su entrenador Luis Fernando Tena, a Ronaldo Cisneros, Uriel Antuna y otro elemento contagiado.
Por otra parte, Ambriz dejó en claro que no ha preparado una estrategia especial para contener el ataque jalisciense con José Juan Macías, un viejo conocido de la institución y que sin duda alguna marca diferencia, pues si prioriza otras cosas, su estilo de juego que tanto gusta pasaría a segundo término.
“Sabiendo cuáles son sus fuertes, intentaremos que no participe en los circuitos. Si me preocupo por él exclusivamente voy a dejar que el equipo funcione como a mí me gusta, sí debemos tener cuidado con él, que esté lo más lejos posible del área, pero sería un error si enfatizo en él”, aseguró.
Finalmente, la Fiera viajará a Guadalajara este viernes después de la comida para concentrarse 24 horas antes del juego en la ciudad, en un hotel donde las indicaciones han sido claras: darles un salón exclusivo para alimentación y ejercicios, además de evitar en la mayor cantidad posible el contacto con los empleados.