Corea del Norte liberó hoy a Joo Won-moon, un estudiante surcoreano que estaba detenido desde abril pasado tras entrar de forma ilegal en el vecino país a través de la frontera con China, informó el Ministerio de Unificación de Corea del Sur.
En una declaración, el ministerio confirmó que Joo fue repatriado la tarde de este lunes por la aldea de Panmunjeom, en lo que podría ser un gesto de reconciliación de Pyongyang hacia Seúl, según un reporte de la agencia oficial de noticias surcoreana Yonhap.
El estudiante surcoreano, de 21 años de la Universidad de Nueva York, estaba retenido desde el pasado 22 de abril por entrar de forma ilegal a Corea del norte a través de la frontera con China, según informó un funcionario del ministerio surcoreano de Unificación.
La fuente afirmó que la repatriación de Joo es “un alivio” y añadió que el régimen de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), nombre oficial de Corea del Norte debería repatriar también a Kim Jung-wook, Kim Kuk-gi y Choe Chun-gil, otros tres surcoreanos que tiene retenidos.
Kim Jung-wook, de 52 años, está retenido en Norcorea desde octubre de 2013, bajo los cargos de entrar ilegalmente en el país e incitar a la disidencia como espía de la Inteligencia surcoreana, por lo que fue sentenciado a cadena perpetua con trabajos forzados en mayo de 2014.
Los otros dos retenidos recibieron también la misma sentencia el pasado mes de junio, acusados también de espiar para el Servicio de Inteligencia Nacional (NIS, según sus siglas en inglés) de Corea del Sur.
La Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA), confirmó en un breve despacho la deportación de Joo, la cual destacó fue “por razones humanitarias”.
En una entrevista emitida en mayo pasado por la cadena estadunidense CNN, Joo admitió haber entrado en el país comunista con la esperanza de que su arresto produjera un buen efecto en las relaciones intercoreanas.
La liberación del joven surcoreano ocurre después de que Corea del Norte elevó las tensiones en la península coreana empañando el acuerdo histórico alcanzado recientemente con el Sur, destacó el reporte de Yonhap.
El pasado 25 de agosto las dos Coreas llegaron a un acuerdo para distender las tensiones militares y reanudar las reuniones de las familias separadas por la Guerra de Corea (1950-1953).
Sin embargo, Pyongyang desafió de nuevo a la comunidad internacional, insinuando que podría poner en órbita un satélite mediante un cohete de largo alcance y llevar a cabo su cuarta prueba nuclear por el día 10, en celebración del 70 aniversario de la fundación del Partido de los Trabajadores.