La falta de planeación genera ciudades dispersas e irracionales, lo que repercute en los costos de inversión de infraestructura, por más impuestos que se recauden las necesidades no se podrán solventar.
El representante de ONU Hábitat en México, Erikc Vitrrup, comentó que en los últimos años se realizó un estudio en 136 ciudades para definir el Índice de Prosperidad Urbana, una herramienta para analizar el nivel de avance que tiene una ciudad. Ello permite que los gobernantes y actores enfoquen sus esfuerzos en donde realmente se necesita.
A nivel mundial y local, el crecimiento de la población en la zona urbana es un desafío monumental, lo que traerá implicaciones directas en la economía. Se prevé que las ciudades compitan por los recursos y los talentos.
Añadió que en México muchas de las ciudades son dispersas e irracionales, donde los costos de inversión salen por el techo y por muchos impuestos que se recauden los gobiernos no se darán abasto. Ejemplificó que la dispersión es tal que cuando se duplica la población se cuatruplica el área habitada de la ciudad.
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