De 2005 a la fecha la importación de árboles de Navidad ha tenido un constante incremento anual de entre 40 mil y 50 mil árboles, por lo que las políticas contra especies invasoras han tenido un papel importante para el control de plagas.
Así lo destacó el subprocurador de Inspección Industrial de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Arturo Rodríguez Abitia, al participar en el inicio del “Taller de identificación de plagas forestales en Árboles de Navidad de importación”.
Durante su discurso de inauguración, destacó que de 2005 a la fecha en que se ha trabajado de manera más sistemática en la revisión de la importación de los pinos de Navidad, han entrado al país poco más de 11 millones de estos árboles.
Dichos especímenes han sido revisados de manera eficaz, por lo que se han detectado oportunamente plagas exóticas que habrían afectado la viabilidad de bosques y selvas, pero que gracias a su detección se ha logrado la conservación de los ecosistemas.
En ese sentido recordó que el año pasado se importaron aproximadamente un millón 100 mil árboles de Navidad, de los que se regresaron más de seis mil, lo que representa apenas 0.6 por ciento, gracia a las estrictas políticas de control que se aplican.
En ese sentido expuso que la Profepa, en coordinación con autoridades de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y de Aduanas han mantenido una preparación constante para garantizar que no se introduzcan plagas que afecten a la biodiversidad nacional.
El número de plagas detectadas en los últimos 10 años, destacó, ha sido menor y precisamente esto ha sido posible gracias a las medidas preventivas aplicadas desde las plantaciones comerciales, principalmente en Oregon, donde se vigila desde su crecimiento.
Una vez que termina el proceso de crecimiento, los árboles son revisados nuevamente antes de llegar a las fronteras y una vez que llegan ahí la Profepa tiene un trabajo constante de inspección bajo la NOM-013.
Las muestras son enviadas a las autoridades de la Semarnat, que determinan si la plaga existe en México o no, pues de ello dependerá la medida que se aplique a dichos árboles, la cual puede ser desde una fumigación, el retorno del producto al país de origen hasta su incineración.
Rodríguez Abitia destacó también la importancia de que los consumidores sean conscientes de la importancia de comprar árboles certificados, por lo que exhortó a la población a que al comprar pinos de Navidad lo haga en lugares donde se garantice que cumplen con las normas ambientales del país.
A su vez, el asesor del Programa de Especies Invasoras, Jordi Parpal Servole, destacó el papel de la Estrategia Nacional de Especies Invasoras, que tras su aprobación ha permitido el control de la introducción de especies bajo tres objetivos estratégicos.
Dichos objetivos son: una dinámica de prevención que ha evitado la introducción de especies dañinas; el establecimiento de mecanismos de control para la importación de especies; y la generación de información que ha permitido generar conciencia sobre el tema.
De ahí la importancia que se lleve a cabo este taller, que forma parte de dichas estrategias para generar un mejor conocimiento que permita un control más estricto de la importación de este tipo de árboles, cuya temporada iniciará a finales de este mes.