El Centro de Estudios Vulcanológicos de la Universidad de Colima reportó un intrigante fenómeno: una bola de fuego con estela de luz que iluminó los cielos de Colima, Jalisco y Michoacán a las 21:41 horas del 25 de julio. Aunque muchos pensaron que se trataba de un meteorito, el centro confirmó que “todo indica que se trata de un bólido”.
Sus sismómetros y sensores de infrasonido captaron la onda de choque que generó, y las cámaras de video registraron la intensa luz.
La señal se detectó primero al sur del volcán y se movió hacia el norte, según los sismogramas de las estaciones de monitoreo. Los sensores de infrasonido también mostraron frecuencias por encima de los 20 Hz, lo que indica que las señales acústicas pueden haber sido escuchadas por personas en la región.
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Los bólidos son meteoros fulgurantes que dejan una estela luminosa mientras avanzan por el cielo y, al estallar, pueden generar un estruendo. Sin embargo, la mayoría de ellos se desintegran en el aire.
El fenómeno ha dejado a los expertos y a los habitantes de la región con preguntas sin respuesta. Aunque se ha descartado que fuera un meteorito, aún no se ha proporcionado una explicación definitiva sobre su origen o naturaleza. Los especialistas continuarán analizando los datos recopilados para desentrañar el misterio de esta impresionante bola de fuego.
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