El Museo Histórico Regional de Ensenada, monumento de carácter civil más antiguo de Baja California, reabrió sus puertas el pasado fin de semana, tras la segunda etapa del Proyecto Integral de Restauración del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Se trató de un proyecto iniciado en 2011 por el arquitecto Jorge Toledo Rivera, encaminado a consolidar la edificación y recuperar las características arquitectónicas que otorgan valor histórico a la construcción.
De acuerdo con el INAH, la edificación, que data de 1886, es un referente arquitectónico del periodo que marcó el surgimiento de la ciudad de Ensenada, y que de igual forma posee un gran significado en la defensa de la frontera noroeste del país.
Durante la segunda fase de la intervención se permitió corroborar información del inmueble recabada en el proceso de investigación documental del monumento.
En diciembre pasado se iniciaron los trabajos que han atendido las fachadas (la principal, las interiores que dan al patio y algunos sectores de las exteriores), mediante el retiro de aplanados de cemento que fueron colocados cuando el inmueble funcionó como cárcel pública y comandancia de la policía municipal hacia la segunda mitad del siglo XX.
Durante ese mismo siglo se le hicieron integraciones que alteraron la arquitectura original del siglo XIX: mutilaciones y añadidos en sus espacios, elementos y partes constitutivas.
El inmueble fue reconocido como Monumento Histórico y en 1993, el entonces gobernador del estado, Ernesto Ruffo Appel hizo la entrega oficial del edificio histórico al Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Desde 1994, el INAH desarrolla proyectos de rehabilitación y adecuación del inmueble para albergar al Museo Histórico Regional de Ensenada, y el 15 de mayo de 1995 abrió al público la primera exposición permanente.