León.- Que las policías se la pasen patrullando todo el día no sirve para reducir la percepción de inseguridad, ni para disminuir la incidencia delictiva, por lo que mejor deberían dedicarse a investigar y detener a delincuentes, pues cada uno de ellos es responsable de aproximadamente 100 delitos, explicó el especialista Bernardo León Olea.
León Olea, quien fue asesor en temas de seguridad durante el trienio de Héctor López Santillana, participó en la presentación del informe “Las Policías en México: Radiografía de un retraso crónico”, elaborado por la organización Causa en Común.
El documento detalla, entre otras cosas, las jornadas laborales extenuantes y dispares entre las policías en México ya que no existe ninguna ley que regule sus horarios de trabajo, que el 28 por ciento de los elementos municipales carecen de seguridad social, y solo en el 10 por ciento de las corporaciones se les ofrecieron prestaciones para gastos funerarios a familias de policías abatidos.
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Esto ha generado que en el último sexenio se tenga registro de 413 protestas de policías en el país, de las cuales 15 ocurrieron en Guanajuato.
En su intervención, Bernardo León apuntó que esta radiografía, junto con las agresiones contra agentes de seguridad pública, se mantendrán mientras carezcan de facultades para investigar y sigan siendo utilizados para tareas denominadas de prevención, sin que nadie sepa definir cuáles son éstas.
“En el reporte se dice que el presupuesto es de terror, cada vez menos, se está militarizando la seguridad pública, los policías son asesinados y tienen jornadas laborales extenuantes… Todo eso tiene un origen: que a las policías en México, especialmente a las municipales, no las dejan hacer su trabajo y las ponen a hacer cosas que no deberían hacer, por eso tienen esas jornadas extenuantes, por eso los asesinan”, dijo.
El también coordinador del Modelo Nacional de Policía y Justicia Cívica resaltó que la presencia de policías en las calles no tiene sustento ni resultados, por lo que deberían ser reorientados a tareas de investigación y coadyuvar con el ministerio público para lograr que los delincuentes sean sentenciados.
“No tiene nada que ver la presencia policial en la percepción de inseguridad ni en la seguridad. Si en México se cometen 30 millones de delitos al año, probablemente sean cometidos por 300 mil personas; si la policía se enfoca a investigar, detener y ayudar al ministerio público a que los procese y los jueces sentencien a esas 300 mil personas, lo que pasaría es que habría un número mucho menor de delitos, y te vas a sentir más seguro”, señaló.
Bernardo León agregó que, al correlacionar el presupuesto y las detenciones de cada corporación, se establece que en México un arresto hecho por policías municipales cuesta, en promedio, 56 mil pesos; uno de la policía estatal ronda los 214 mil pesos, mientras que cada detención hecha por la Guardia Nacional cuesta 24 millones de pesos.
/LT
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