La tarde del martes se hicieron virales imágenes y videos de una joven de 19 años que pedía ayuda desde la azotea de una vivienda ubicada en San Francisco Culhuacán, alcaldía Coyoacán en la CDMX asegurando que estaba secuestrada por sus propios familiares. Mientras llamaba la atención de vecinos con sus gritos de auxilio, la enfermera Paola Gisselle compartía una transmisión en su cuenta de Facebook acompañada de este texto:
“Me están privando de mi libertad familiares míos, tengo casi 24 horas encerrada. Y hay niños pequeños”.
“Estas personas son capaces de cualquier cosa, hasta de golpearse ellos mismos y culpan a otra persona. De inventar que les roban joyas de oro o electrónicos. Los que los conocen saben que no es verdad”.
Tras recibir el reporte de una posible denuncia por privación de la libertad, las autoridades acudieron a entrevistarla y la joven aclaró que no estaba secuestrada sino que un familiar había colocado una puerta metálica que había cerrado el acceso a su vivienda. Posteriormente, la afectada acudió a la Fiscalía General de Justicia de la CDMX a rendir su declaración.
Como antecedente, la Secretaría de Seguridad Ciudadana reportó que hay una disputa entre familiares para determinar la propiedad del inmueble ademas de que el predio cuenta con una carpeta de investigación relacionada con el delito de despojo.
/r
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