En los últimos seis años, poco más de 1 mil 300 policías estatales en Guanajuato han decidido renunciar, siendo el 2018 el año con más registros, justo cuando los homicidios dolosos en el estado se dispararon 131%.
Además, en ese mismo lapso, van seis denuncias penales en contra de elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado.
Datos proporcionados por la Secretaría de Seguridad Pública de la entidad, reflejan que de 2016 a octubre de este año, 1 mil 342 elementos que formaban parte de las FSPE han optado por no formar parte de esta corporación.
De dicha cifra, casi una tercera parte (391) se separaron en 2018, año que cerró con 3 mil 290 personas asesinadas, 1 mil 867 más en comparación con 2017.
En 2019, a pesar de que hubo un nuevo incremento del 7.5% en los homicidios, la cantidad de policías estatales que renunciaron bajó 287. Esto se puede explicar en parte por el aumento salarial del 33% que fue anunciado a finales de ese mismo año.
El año pasado, renunciaron otros 192 y de enero a octubre de este año, sumaron 197.
Sin embargo, si bien se han logrado contener las renuncias, los despidos de policías estatales van en sentido contrario, al igual que las denuncias penales contra algunos de ellos.
De 2016 a la fecha, la Secretaría de Seguridad Pública de Guanajuato ha dado de baja a 208 elementos, de los cuales el 61% ocurrieron en los últimos tres años.
Incluso este año, a falta de dos meses para que concluya, la cifra de policías cesados ya rebasa la registrada en todo 2020 y es la mayor en los últimos siete años.
De enero a octubre de este año fueron despedidos 47 policías estatales, seis más en relación con 2020. En 2019 fueron 39, y 17 en 2018.
Además, la dependencia a cargo de Alvar Cabeza de Vaca informó que este año han sido presentadas cinco denuncias penales contra expolicías estatales, mientras que en 2019 se interpuso otra.
En los seis casos el delito que se persigue es abuso de confianza.
Suman 52.2 millones de pesos pagos de finiquitos y liquidaciones
Con base en lo anterior, el pago de finiquitos y liquidaciones este año es 10 veces mayor a lo que la Secretaría de Seguridad Pública del estado desembolsó en 2016. Ese año, por ambos conceptos, pagó 5.8 millones, mientras que ahora el monto asciende a 52 millones 209 mil pesos.
El año pasado, para estos mismos rubros, fueron destinados para 35.5 millones y hace dos años 26.9 millones de pesos.
