Información publicada en la revista Nature Astronomy reveló que en la Luna hay más agua de lo que se creía.
El líquido se encuentra atrapado en los cráteres en donde no llega la luz del sol, por lo que está tan congelada que parecen rocas.
A estos microcráteres se les conoce como trampas frías.
“Hay decenas de miles de millones de ellos, mientras que los más grandes son unos cientos”, explicó el investigador Paul Hayne.
En caso de que pudieran desarrollarse técnicas de extracción, serviría para las misiones espaciales.
Se deslizó que probablemente el agua encontrada provenga de choques de asteroides de hace miles de millones de años.