La noche de este domingo, ladrones tiraron la puerta de una catedral de Francia y se llevaron varias reliquias de oro.
Dicho templo había sido declarado Patrimonio Mundial de la Unesco.
La puerta de la catedral fue tirada cuando los ladrones ataron un tronco a un auto y la golpearon.
Se robaron también los cálices, cruces y otros objetos ceremoniales de la catedral, además de una colección de vestimenta para sacerdotes.
Las rejas donde estaban guardados dichos objetos fueron cortadas con serruchos.
Momentos después del robo, la policía encontró el auto de los delincuentes abandonado cerca de la escena.
El ministro de Cultura garantizó que encontraron a los responsables y serán castigados por la justicia.
“Más allá del valor monetario, los residentes se encuentran ahora aislados de su historia y de su patrimonio”.
Discussion about this post