Fue agobiado por su situación personal y en medio de un cuadro depresivo que se prolongaba ya por mucho tiempo, que un hombre de la colonia Diez de Mayo decidió terminar con su vida y ejecutó su voluntad.
Camelia Rangel, de 37 años de edad, identificó el cuerpo de su hermano, Margarito Rangel Carpio, de 31 años de edad, ante el Ministerio Público y dijo que él vivía deprimido y sólo desde mucho tiempo antes de terminar con su vida.
Margarito fue encontrado colgado por el cuello en casa, en la colonia Diez de Mayo, alrededor de las diez de la mañana del lunes, y aunque pretendieron darle auxilio, para esos momentos él ya había perdido la vida.
La muerte de Margarito, infligida por propia mano, fue la culminación de una larga temporada de depresión de un hombre que se trabajaba por su cuenta impermeabilizando azoteas, que vivía sólo aunque tenía dos hijos a los que veía ocasionalmente y que enfrentaba problemas de adicciones, según las referencias dadas por sus familiares al Ministerio Público en ocasión de la identificación de su cadáver.
Esa autoridad, por su parte, confirmó este martes que el caso fue un suicidio.
