León.- Sin garantía de derechos humanos y sin acceso a servicios básicos dignos, la tarea de erradicar la pobreza será aún más complicada, incluso con tendencias a la baja en este indicador.
David Herrerías, activista e integrante de la asociación ‘No + Pobreza’ consideró que, de nada sirve los aumentos salariales, si la falta de dichos factores lleva a la sociedad a elevar sus gastos.
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“Porque, si no, la gente al final aunque tenga una mejora en su ingreso si eso se le va a tener que ir en salud, porque el seguro social no da servicios adecuados, si se le va en movilidad porque la movilidad es deficiente, si va a tener que pagar educación privada, si el acceso al agua es deficiente y va a tener que pagar pipas, no acabas de resolver el problema”, dijo.
El activista reconoció que, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), en 2022 hubo indicadores a la baja en este tema.
“En el 2022 sí mejoraron, bajamos 8 puntos en la pobreza; como de 43 al 30 y tantos de la pobreza. Esa mejora tiene que ver mucho con el aumento del ingreso o del salario mínimo; hay una parecida que tiene que ver con las remesas y cosas así pero, básicamente, tuvo que ver con el aumento del salario mínimo”, señaló.
Con base en datos del CONEVAL, en 2022 fueron reportados 2 millones 073 mil 708 personas en situación de pobreza, mientras que en 2018 esta cifra ascendía a los dos millones 587 mil.
/LT
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