En lo que va del año, la Dirección de Fiscalización en León ha clausurado cerca de 150 establecimientos en los que se vendía alcohol sin contar con el permiso para ello, informó el titular de la dependencia, Francisco Hernández Arenas.
Señaló que el año pasado en total fueron clausurados, parcial o totalmente, 480 establecimientos por este motivo, de los cuales el 90 por ciento eran tiendas de abarrotes, aunque posteriormente 140 lograron obtener el respectivo permiso ante la Secretaría de Finanzas.
Son dos tipos de clausuras, una es la total y otra es la parcial. La parcial es cuando el negocio, aparte de las bebidas alcohólicas, vende otro tipo de productos y la total es cuando es exclusivamente de bebida alcohólica, entonces clausuramos solo los refrigeradores o inhabilitamos las bebidas alcohólicas y les ponemos los sellos de clausura”.
En ocasiones hay denuncias que tenemos que atender, pero también vamos programando nosotros las visitas a ciertos negocios y colonias”.
Agregó que las multas dependen de varios factores, entre ellos el tamaño del establecimiento, por lo cual pueden ir desde los 800 pesos hasta 109 mil pesos, misma que debe ser pagada aún y cuando posterior a la clausura se tramite el permiso para vender alcohol.
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