Miles de personas hacen fila en 35 ciudades para escanear sus ojos y recibir la nueva criptomoneda, Worldcoin (WLD), impulsada por Sam Altman, CEO de OpenAI. El sistema asigna un “World ID” único, creando la base de datos más grande de humanos auténticos.
La iniciativa busca resolver la falta de identificaciones legales en más del 50 % de la población mundial.
El escaneo ocular se realiza a través de “orbes” plateados que emiten un pitido tras unos segundos de mirar el lente de la cámara. Los usuarios obtienen 25 tokens Worldcoin, valorados en aproximadamente $2 cada uno. Altman y su equipo tienen como objetivo crear una identidad y red financiera colectiva, facilitando el acceso a servicios digitales y demostrando la autenticidad de los usuarios.
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Aunque la World App ofrece acceso a finanzas descentralizadas, la criptomoneda aún no está disponible en Estados Unidos debido a la regulación.
El proyecto ha recibido críticas sobre privacidad y control estatal, pero Altman defiende su visión de una posible Renta Básica Universal impulsada por la inteligencia artificial. Sin embargo, admitió que este concepto aún está lejos de ser una realidad concreta.
El registro de humanos con Worldcoin plantea interrogantes sobre el financiamiento de una Renta Básica Universal y el manejo de los datos recopilados. A pesar de las críticas, Altman ve este proyecto como una oportunidad para progresar y avanzar hacia soluciones innovadoras.
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