Hasta este jueves, no había sido identificado el hombre que se disparó a sí mismo en el pecho, según la hipótesis más firme de la Procuraría, si bien ahora sus funcionarios aseguraron que no la darán por hechos hasta que sea plenamente confirmada o descartada.
Sobre ese caso habló el director de investigación especializada, Jesús Aguilera, quien señaló que en la muerte del hombre que murió en la calle Iztaccíhuatl, el pasado martes, en un incidente en que intervenían policías preventivos, los testimonios y otros datos apuntan a un suicidio.
Hizo hincapié, sin embargo, en que no es convicción plena del Ministerio Público que los hechos sean un suicidio, pues las indagaciones no han sido concluidas y será hasta que esto ocurra, que se pronunciará sobre como ocurrieron esos hechos y si realmente se trata de una muerte por suicidio.
El cadáver del ahora occiso continuaba depositado este jueves en las instalaciones del Ministerio Público, donde esperan las autoridades que sea identificado.
Tatuajes que presenta el cuerpo son datos que pudieran ayudar a identificarlo: el rostro de un vikingo en el brazo derecho; un paisaje chino a tres tintas en el brazo izquierdo, un guerrero azteca y una mujer sacrificada en el lado izquierdo de la espalda y un Pegaso en el antebrazo derecho.
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