Luego de que personas armadas irrumpieran en hospitales de Apaseo El Grande y Juventino Rosas, la comisionada de la Unidad de análisis y estrategia para la seguridad, Sophia Huett, descartó que personal médico resultara afectado en estos hechos, aunque indicó que se requiere reforzar los protocolos en conjunto con la Secretaría de Salud estatal.
La noche del miércoles un comando armado entró a un hospital de Juventino Rosas para llevarse a una persona que se encontraba internada ahí, mientras que en un hospital de Apaseo El Grande sujetos armados ingresaron para asesinar a un lesionado que estaba siendo atendido.
La funcionaria reconoció que los últimos días en la zona de los Apaseos han sido complicados, y es incluso la región donde se concentra la mayor cantidad de homicidios, aunque indicó que, en el caso de los referidos hospitales, el personal médico no resultó afectado al tratarse de ataques dirigidos.
“Se sigue trabajando y fortaleciendo la colaboración entre el sector salud y las autoridades en materia de seguridad, tanto a nivel estatal como municipal; afortunadamente no hay una afectación a personal médico, son ataques muy dirigidos, en algunas ocasiones son personas que llegan lesionadas, que irrumpen en este tipo de instalaciones con el objetivo de lograr su cometido, que era privar de la vida a estas personas”, dijo.
En otro tema, sobre el grupo de ciudadanos que vandalizaron la casa de la Alcaldesa de Cuerámaro para protestar por el asesinato de cuatro jóvenes, Sophia Huett indicó que fueron detenidas aproximadamente 20 personas, aunque señaló que los actos tuvieron la intención de manifestar una inconformidad, no la de causar terror entre la población.
“Hay que entender que hay varios elementos que podrían tipificarse como terrorismo y otros tantos como una manifestación legítima, en este caso el objetivo, hasta donde entendemos, de quienes se manifestaron, no era generar miedo entre la ciudadanía, sino mostrar su inconformidad ante un evento”, dijo.
Discussion about this post