Argentina encabeza la tasa de obesidad infantil en América Latina con 9.9 por ciento, seguido por el 9.8 por ciento que registra Perú y 9.5 por ciento de Chile, dijo hoy la Organización de ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
De acuerdo con el organismo, que publicó el Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional en América Latina y el Caribe, uno de cada diez niños en el país sudamericano supera el peso que le permitirá desarrollarse de manera saludable.
En términos absolutos, diversos especialistas calculan que alrededor de 3.2 millones de niños padecen sobrepeso, lo que los convierte en candidatos ideales a sufrir enfermedades como hipertensión, a lo que se suma el acoso escolar del que suelen ser objeto por su obesidad.
Las cifras solo reflejan el estado general de la población argentina, ya que la mitad de los adultos padece problemas nutricionales, mientras que uno de cada cuatro adolescentes registra sobrepeso y obesidad, que son considerados parte de los problemas de salud más graves de este siglo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) determinó que el 63.9 por ciento de los argentinos tiene sobrepeso, mientras que el 23.6 por ciento padece obesidad, lo que repercute en el incremento de enfermedades cardiovasculares.
El problema, además, ha ido en aumento, porque en 2010 la OMS calculó que el 7.3 de los niños argentinos tenía obesidad infantil, pero en 2013, la FAO indicó que la tasa era del 9.9 por ciento.
En 2012, en Argentina se realizó la Encuesta Mundial de Salud Escolar que reveló que en los últimos cinco años el sobrepeso infantil había crecido del 24.5 al 28.6 por ciento, y la obesidad del 4.4 al 5.9 por ciento, lo que confirmó la tendencia creciente.
Los datos del sondeo fueron muy esclarecedores, ya que se descubrió que sólo el 17.6 por ciento de los menores comía cinco porciones diarias de frutas y verduras, mientras que la mitad consumía dos o más bebidas azucaradas al día.
La gravedad del problema también fue evidenciada por la Fundación Interamericana del Corazón (FIC) Argentina, que analizó la publicidad de alimentos en los programas infantiles, técnicas promocionales y calidad nutricional de los productos.
Los resultados no fueron nada alentadores, ya que se descubrió que en las tandas comerciales de los programas infantiles los productos más publicitados son los postres, lácteos, bebidas azucaradas, cadenas de comida rápida y snacks salados.
Para convencer a los menores de consumir estos productos, en uno de cada cuatro anuncios aparecen personajes animados famosos, pero en uno de cada tres se presentan promociones para obtener más productos.
El estudio de FIC comprobó que el 85.3 por ciento de los alimentos publicitados para los niños tiene un bajo nivel nutritivo, alto contenido en grasas totales, grasas saturadas, grasas trans, azúcares libres, sal y calorías.