Actuó con sangre fría y con toda calma el grupo armado que asesinó a un hombre y una mujer la tarde ayer en un departamento de Privada de Las Hilamas y tras el asesinato estuvo sacando bolsas y cajas de la casa de las víctimas para luego marcharse sin mayor problema, dejando la puerta cerrada, y el hecho, aunque fue reportado, no fue comprobado sino hasta horas después a las autoridades.
Así lo señaló este miércoles Érick Neftalí Sáncez, coordinador de fiscales investigadores en el fuero común al hablar sobre el asesinato a balazos de Carlos Rodrigo de 27 años de edad, alias “El Picoro”, quien era investigado por el Ministerio Público por robos, pero no había sido procesado penalmente.
De la mujer asesinada, las autoridades investigadoras señalaron que no ha sido identificada y la describieron como una mujer de 25 a 30 años de edad, delgada, de 1.6 metros de estatura y el cuerpo presenta gran cantidad de tatuajes.
Notas musicales a una tienta en una de sus orejas; una figura de hoja de mariguana; la leyenda: Recuerdo de la familia Rizo; la leyenda Yerbabuena; unas manos en oración y con un rosario; los apellidos Granados y Gómez; las letras FJP; el nombre Pedro; un rostro femenino caracterizado como payaso y con sombrero; una estrella en diferentes partes del cuerpo.
Además tiene tatuado el nombre de Ángeles en la Región Lumbar.
Operativo Criminal.
Con base en un testimonio logrado por el Ministerio Público, se conoce una mecánica de hechos y se tiene el dato de que un grupo armado, formado por cuatro hombres, llegó hasta el frente de la casa de las víctimas en dos vehículos; al descender, todos los que lo formaban se colocaron en las manos guantes de latex y enseguida entraron armados a la casa. Dentro se escuchó escándalo y disparos.
Después de eso tres de los hombres se dedicaron a sacar de la casa cajas y bolsas cuyos contenidos no se conocen. Primero hicieron un vieja hasta los vehículos, donde colocaron los objetos; luego volvieron por más y procedieron de la misma manera.
El cuarto implicado permaneció vigilante mientras tanto.
Una vez que concluyeron, cerraron la puerta y se marcharon en sus vehículo.
No se sabe cuánto duró ese operativo criminal.
Una vez que los homicidas se marcharon, se escuchó el llanto de una mujer en el interior, pero aparentemente nadie intervino.
El reporte, la investigación.
Según información ministerial, hasta cerca de las ocho de la noche reportó al Secretaría de Seguridad Pública Municipal tener conocimiento de un doble homicidio y la intervención ministerial se dio alrededor de las diez de la noche para procesar la escena del crimen.
Cuando entraron las autoridades encontraron muertos a Carlos Rodrígo y la mujer, hasta ahora no identificada. La casa estaba vacía y ese era el domicilio que señalan para él.
Carlos Rodrigo sufrió un total de seis impactos de bala, y murió por uno que le penetró el cráneo. Ella sufrió cinco impactos de bala y murió por impactos de bala en el cráneo.
El testimonio sobre el llanto de una mujer no precisa si estuvo en el lugar otra persona además de las víctimadas.
Sin pista.
Sobre los homicidas, el Ministerio Público aseguró que no se tiene datos de características de los vehículos ni de los homicidas.
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